Candelariazos / Antonio Barreto Sira
Solidaridad total. Opinión-. Desde las siguientes líneas quiero expresar toda mi solidaridad y respaldo para las enfermeras Karen Peraza, Iliana Castillo y Denilda Luna, quienes fueron detenidas por Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) en un acto infausto y cuestionable.
Este hecho es altamente irregular y violador de los derechos humanos de estas trabajadoras del sector salud. Como gobernador les envió a ellas todo mi apoyo moral y alzo mi voz para denunciar el atropello del cual fueron víctimas.
Me hago eco de estas palabras: “Qué más nos van a quitar, si ya se ha perdido todo. No pueden seguir sacrificando sus propias vidas por tratar de solventar lo que no se puede solventar. Hay que luchar para poder recuperar la calidad de vida y nuestras condiciones laborales”, parte del comunicado hecho público por el Colegio de Enfermería de Anzoátegui.
A todas luces, este fue un acto que busca intimidar las constantes protestas de los médicos y enfermeras que luchan por más dotación en los centros asistenciales y por sueldos que en verdad dignifique su loable labor de salvar vidas.
Esta es no es la primera vez que se pretende silenciar la voz de protesta del ciudadano con medidas similares. Por eso, nosotros responsablemente repudiamos estos hechos de intimidación y solicitamos que se aclare la situación.
Porque, a pesar que los tribunales dictaron una medida de “libertad sin restricciones”, el episodio no deja de ser preocupante. Si dejamos pasar este suceso, donde representantes del sector profesional que protagonizan luchan reivindicativas son acusados de cualquier delito y detenidos de forma abrupta, mañana seguirán ocurriendo con cada vez más frecuencia este tipo de detenciones.
Por eso aplaudo que enfermeras, médicos y ciudadanos de a pie hayan manifestado su repudio a tal episodio.
Además, en este artículo quiero reafirmar mi compromiso de trabajo de la mano del sector salud del estado. Juntos hemos logrado avanzar en políticas de salud preventiva, y allí está la cifra de mucho más de 20 mil personas beneficiadas a través del programa La Caravana de la Salud y vamos por muchos más ciudadanos favorecidos por esta iniciativa.
Aquí tienen a un gobernador que está casado con la idea de salvar vidas. Hasta ahora no ha sido tarea fácil, pero sé que juntos podemos marcar la diferencia.
También quiero, en este artículo, invitar a todos los anzoatiguenses a seguir unidos y defendiéndonos unos a otros, así como ayer aprehendieron a unas enfermeras mañana puede ser cualquiera de nosotros, solo la cohesión puede hacernos fuertes ante este tipo de atropellos.