La Sala de Apelaciones de la Corte Penal Internacional (CPI) rechazó la solicitud del gobierno venezolano de suspender las facultades investigativas del fiscal Karim Khan respecto al caso Venezuela I, por presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos en el país desde el 2017.
Los jueces de la Sala de Apelaciones rechazaron los tres argumentos esgrimidos por la administración de Nicolás Maduro respecto a las consecuencias sobre el memorando de entendimiento entre la Fiscalía de la CPI y el Estado venezolano con esta investigación, que los hechos no son competencia de este alto tribunal; y por último que las entrevistas en el marco de este proceso generarían «un trauma innecesario y mancillaría la integridad de la evidencia» reseñó Tal Cual.
Tras la decisión, se mantienen las facultades del fiscal Khan mientras dure el proceso de apelación hecho por el Ejecutivo que podría durar unos meses.
Los jueces de la CPI afirmaron en el escrito que Venezuela no demostró los daños o consecuencias irreversibles que podrían generarse sobre el memorando de entendimiento, si el fiscal Khan continúa sus investigaciones.
La Sala de Apelaciones también autorizó desde el 21 de julio a la Defensoría Pública de las Víctimas para que presente observaciones escritas, con una extensión máxima de 40 páginas, al escrito de apelación hecho por el gobierno respecto a los intereses generales de las víctimas venezolanas; las observaciones deberán ser presentadas en los próximos 21 días.
A juicio del director de la ONG Acceso a la Justicia, Ali Daniels, esta decisión es una nueva muestra de la imparcialidad e independencia de la Corte Penal Internacional.
«Sin duda, hay una decisión de la CPI en reducir los lapsos en todos los asuntos, al tiempo que en este caso los argumentos infundados, dilatorios y superficiales del Estado contribuyen a que los jueces puedan decidir con mayor celeridad este tipo de recursos inocuos», señaló Provea en un comunicado.