Comunicado de periodistas de Yaracuy.- Leales al interés de la ciudadanía, como periodistas de profesión, exigimos al gobernador, Julio León Heredia, respeto para quienes ejercen esta labor en Yaracuy.
En vista de la negación de nuestro Secretario General, Pedro Bolaños, y parte de la directiva seccional a debatir con seriedad y pertinencia la defensa del gremio por su evidente compromiso político, nos organizamos de manera independiente a suscribir este manifiesto en el que deploramos la confrontación, así como el descrédito al que el primer mandatario regional sometió a los colegas Héctor Duque y Joel Vargas el pasado martes. Ambos, testigos de la represión del 23E en el estado, fueron víctimas de una conducta que encarnó del ex presidente Chávez, quien para desviar la atención cuando le incomodaba algún señalamiento, denigraba al profesional tildándolo de político, o cambiaba de rol y le preguntaba en qué partido simpatizaba.
Visiblemente molesto, y con el dedo inquisidor les exigió responsabilidad. ¿Acaso olvidó cuando en 2017 presentó un video en una rueda de prensa sobre un supuesto linchamiento en el país cuando verdaderamente ocurrió en Guatemala, material audiovisual con el que justificó un decreto de prohibición de uso de capuchas en las marchas, y lo que dio pie para la persecución de opositores en la entidad? Esa grabación y sus comentarios desaparecieron inexplicablemente de sus redes sociales, así que el que esté libre de pecado, que lance la primera piedra.
El periodismo no es complaciente y menos en momentos de tanta crisis, conflictividad, censura, e incertidumbre. Al arremeter contra los colegas, o sus interrogantes usted está vulnerando la libertad de expresión, el origen de la humanidad, fundamento de los derechos humanos, y la madre de la verdad, esa que nunca penetra en una mente no dispuesta. “Si no intervenimos o no opinamos solo seremos manipulados por quienes tienen el poder”, como lo dijo Javier Darío Restrepo.
Es una contradicción hablar de paz cuando ataca a quien solo busca informar de manera veraz ante la denuncia de actos procesales llenos de vicios, el bloqueo hacia el Circuito Penal por parte de la Guardia Nacional y la policía, el silencio tanto de la Defensoría del Pueblo, como del Consejo de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, y la señalada falta de autonomía en el poder judicial local.
El artículo 2 de nuestro Código de Ética expresa claramente: “El periodista tiene su origen en la libertad de expresión y el derecho a la información, normas democráticas consagradas en la Constitución de la República. El periodista debe luchar por la vigencia y efectividad de tales principios”; por eso, para garantizar su cumplimiento contrastamos los testimonios con la única fuente oficial autorizada para declarar: usted.
Asimismo, condenamos el despido arbitrario e ilegal como retaliación política contra Roseliano Díaz, corresponsal de VTV, quien harto de las presiones, y negado a ser cómplice de la invisibilización de un hecho relevante, le hizo una pregunta “desapegada a lineamientos”. Citando a Churchill, “Un hombre hace lo que debe, a pesar de las consecuencias personales, de los obstáculos, peligros y presiones, y eso es la base de la moral humana”.
Gobernador, cuán complicado se ha vuelto nuestro oficio en la entidad. A la asfixia impuesta por el régimen de Nicolás Maduro sobrevive un solo medio impreso, uno televisivo, y las radios están permanentemente monitoreadas por Conatel. La más reciente prohibición conducente a sanción e inhabilitación es nombrar al presidente encargado, Juan Guaidó. Dependiendo del tema las convocatorias son privadas, condicionan las intervenciones, limitan las preguntas por tipo de medio, dan prioridad a los alternativos, incluso no es la primera vez que en ruedas de prensa militantes del PSUV humillen a algún colega, de ellos hoy tenemos decenas en el exilio, así como periodistas agredidos y robados por funcionarios de la policía que actúan libre e impunemente. Esto solo se ha visto en “revolución”.
Por último, nos deslindamos de las declaraciones contra monseñor Víctor Hugo Basabe emitidas este domingo por Pedro Bolaños; lo expresado obedece a una posición estrictamente personal, y por ende, no representa el sentimiento de la mayoría de los periodistas yaracuyanos.
En medio de amenazas y atropellos, hemos decidido quebrar la lanza -cual Quijote- para seguir resistiendo. No nos queda la menor duda de que así como el país, estamos viviendo una transición de la mordaza a la libertad.
En estos 20 años el periodismo tiene mucho que contar, pero la historia a todos no absolverá.