El plazo de tres años que otorgó la Ley Orgánica del Trabajo, las Trabajadoras y los Trabajadores (Lottt), aprobada en mayo de 2012, donde se establece este que patronos públicos y privados normalicen la situación de empleados «tercerizados», vence hoy 1ro de mayo de 2015. Sin embargo y a la espera de los anuncios que tiene previsto realizar el presidente Nicolás Maduro, los petroleros de la Faja Petrolífera del Orinoco que se mantienen en esta condición, aseguran que las inspecciones que era necesario realizar para eliminar la tercerización, nunca se hicieron.
Edgar Mata, secretario sindical del Partido Comunista de Venezuela (PCV) en el municipio Simón Rodríguez y miembro del sindicato STPG (Sindicato de Trabajadores Petroleros y del Gas), explica que luego de meses realizando asambleas de trabajadores, audiencias en la Inspectoría del Trabajo de El Tigre y reuniones en la Asamblea Nacional y el propio Ministerio del Trabajo, sede Caracas, aún existen unos 1.000 trabajadores tercerizados operando en la Faja Petrolífera del Orinoco (FPO).
«El trabajador petrolero en la actualidad se siente un poco atropellado ya que en ciertas áreas de PDVSA se está violando la contratación colectiva. También vemos que hay retraso hasta de un año, en la entrega de dotación de implementos de seguridad», desde cosas tan básicas como bragas, botas, guantes. «Un par de guantes pueden gastarse hasta en media hora, dependiendo de la actividad que estemos realizando. Anteriormente las contratistas daban un par de guantes diarios pero ahora alegan por ejemplo, que hay escasez, y lo que hay que ver es la labor que realizamos a diario en la industria», explicó Mata señalando que en la actualidad hay 15 trabajadores de la contratista Comanpa con calificaciones negativas por presuntamente exigir la dotación de equipos básicos para poder realizar el trabajo sin arriesgar sus vidas.
Motivados por esta situación crearon en marzo el Frente de Lucha Clasista para la Eliminación de la Tercerización en la Faja Petrolífera del Orinoco (FPO), que a la fecha tiene 650 trabajadores tercerizados alistados. Sin embargo, siguen a la espera de poder contar con una realidad diferente que ponga fin al desgaste. «Esperemos que en homenaje a ese trabajador que día a día lucha por la nación, diga algo favorable para los más de 1.000 trabajadores tercerizados que hay en la Faja Petrolífera del Orinoco».
«No estamos en revolución, estamos en un proceso de liberación de conducción al socialismo»
De esta forma Alan Figuera, secretario político del PCV en Simón Rodríguez y secretario de reclamos de Sutrapetrorinoco, reitera en un par de oportunidades el descontento que este 1ro de mayo tienen los petroleros de los que ha sido voz en muchas oportunidades.
«Nos encontramos acá con una Inspectoría del Trabajo que ha sido muy deficiente con una LOTT que señala inamovilidad laboral y no la hay. Tampoco se ha hecho ninguna inspección y en función de eso nosotros hacemos una propuesta: Nosotros pretendemos plantear una unidad orgánica en defensa de los trabajadores para que realmente se tome en cuenta al trabajador para este proceso de cambio, si es que queremos profundizar la revolución. Siempre lo he dicho no estamos en revolución, estamos en un proceso de liberación de conducción al socialismo».
Figuera afirma que mientras se estén agudizando las contradicciones, allí es donde los trabajadores deben tomar el poder. «Aquí lo que hay es un encuentro de dos burguesías que se están encontrando». Se refirió a los políticos de la cuarta y a una burguesía que se ha aprovechado de este proceso de cambio en el país, generándose una pelea interna que ha «golpeado» al proletariado.
Impunidad
Desde 2007 indica que han visto pasar más de 1000 empresas contratistas
«Esta madriguera de contratistas que crearon estos gerentes para enriquecerse está relacionada a la crisis económica que vivimos, más allá de la guerra económica que el gobierno norteamericano ha intentado hacer. Pero a lo interno también tenemos enemigos, estos gerentes que han permitido una fuga de dólares, suficientes para tener a nuestra Venezuela con una economía robusta. Hasta ahora se están logrando algunas destituciones, sí, pero se van unos gerentes enriquecidos y no sabemos quién viene y nosotros seguimos aquí con las mismas necesidades, problemáticas y hasta enfermos. Vienen momentos de lucha, tenemos que despertar si queremos dar un cambio productivo y para eso es necesario un cambio de conciencia», concluyó Alan Figuera.
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