Tres días durmiendo en su carro. Orlando Espinoza es uno de los anzoatiguenses que se ve en la necesidad de maltratar su sueño y su jornada diaria por completo, a cambio de una batería para su vehículo.
«Esto es incomodísimo», comentó a El Vistazo, cuando faltaban menos de 5 carros para que llegara su turno en la tienda de baterías Duncan del municipio Guanipa, la única ubicada al sur de Anzoátegui. Orlando hizo guardias con sus familiares para poder asearse, comer algo y volver a su «cola».
Jorge Luces, también pasó 3 días. A diferencia de su compañero de odisea, Jorge dejaba el carro cuando la tienda cerraba, y optaba por regresar en horas de la madrugada. Y en una oportunidad escucharon tres tiros cerca de la avenida Fernández Padilla.
Ellos hicieron el sacrificio para comprar una batería de 800 amperios cotizada entre 9 y 11 millones de bolívares. Conseguirla de forma irregular, digamos «bachaqueada», una vía mucho más rápida, puede costar desde 45 hasta 68 millones.