El viernes 22 de mayo una protesta a favor del médico cirujano Edi Rojas se tornó luego en la exigencia de la destitución de Yindri Marcano, directora del hospital de El Tigre.
La manifestación comenzó antes de las 9 am en el lobby de entrada con el testimonio de Rojas. «La doctora tiene un acoso contra mi persona e igualmente contra el personal médico, de enfermeros y personal obrero», denunció.
Al preguntarle detalles de la situación, Rojas que dijo estar a punto de cumplir 25 años de servicio en esta institución, expresó:
«La directora está pensando que yo llevo a los pacientes a quirófano y les cobro, eso es mentira. Allí están varios pacientes que pueden decir la verdad. En cambio, hay médicos que sí le cobran a los pacientes», reveló. Dijo además que todos sus movimientos en quirófano eran fiscalizados.
Posteriormente declararon a favor de Rojas varios representantes sindicales que incluso solicitaron al director del Cicpc, Douglas Rico, una investigación en este recinto.
«Cuando no teníamos cirujano en la institución, el doctor Edi cabalgó todo el tiempo para ayudar a la comunidad. Solicitamos a la dirección una reunión urgente para que clarifique cuál es la situación», expresó Belkis Sifontes de Sunep – SAS, Sindicato Único Nacional de Empleados Públicos del Sector Salud.
Al terminar de pronunciar esto, Sifontes fue abucheada por los manifestantes que comenzaron a mostrarse «intratables» ante cualquier asomo de negociación/clarificación de la dirección con respecto al caso de Rojas, y ahora solo exigían al gobernador Antonio Barreto Sira y al gobernante Nicolás Maduro, la salida de Marcano.
«Hasta que se vaya, fuera, Yindri se va, Edi se queda», era lo se escuchaba mientras se movían del lobby al pequeño espacio de dirección donde se quedaron por más de dos horas un grupo de unas 40 personas. Varios de ellos denunciaron sentirse discriminados, maltratados y desplazados, como la radiólogo Ana Karina Barbati y el coordinador de este servicio Pecos Aguilera.
Algunos pacientes que no revelaron su identidad por temor a ser tachados del servicio de este hospital público, afirmaron que por una cesárea cobran entre 150 y 180 dólares, por una apendicitis 100.
En ese interín la directora desde su oficina pidió hablar con varios líderes de la protesta y con el mismo Rojas. Este último se negó cuando el resto de manifestantes pedían que las declaraciones las diera la directora en presencia de todos.
Ya en horas del mediodía Marcano intentó mediar con el grupo de la protesta pero no pudo y decidió dar sus declaraciones a los medios. Allí afirmó que se trataba de problemas políticos que sólo buscaban desviar el trabajo que ella y su equipo vienen haciendo en la institución, así como con la revisión de casos sospechosos del Covid19 en la zona. «Esta situación de hoy es exagerada y montada».
Al consultarle por unos chats que imprimieron los manifestantes, en los que se habla de traslados irregulares de comida propiedad del hospital y prácticas relacionadas con brujería, Marcano expresó:
«Ese tipo de cosas no las hago, soy santera, la religión la tengo, no soy palera ni soy espiritista, esta es una religión muy hermosa en la que me metí por sanación, tengo ya 11 años (…) de mi no pueden buscar que le haga mal a nadie».
En vista de la posición firme de la protesta llegó al hospital un piquete de la GNB. Un funcionario pidió que un grupo de manifestantes saliera del recinto para exponer la situación. Edi Rojas salió de la dirección con un grupo pero en la recepción vieron sospechosa la insistencia de los militares de «ir afuera». Alguien comenzó a decir «es una trampa Edi, no salgas, es una trampa» y rápidamente se devolvieron a dirección.
La directiva pidió apoyo al concejal Dimas Acosta, quien arribó al centro medico a las 11.30 am. Además del presidente de la Comisión de Salud de la Cámara Municipal, también llegaron el burgomaestre Ernesto Raydán, Andrew Espejo que es director de la Alcaldía y Nelson Hernández, secretario de Acción Democrática. Entre todos acordaron hacer una especie de auditoría y se levantaron dos actas. En una de ellas queda manifiesto que Raydán conformó una comisión directiva de la que está encargada la emergenciólogo Moraima Yépez.
En horas de la noche del viernes se conoció de forma extraoficial la renuncia de Marcano, así como la negativa de otros miembros de la directiva de asumir el cargo. Si bien hasta la tarde de este sábado 23 aún no se tenía definido a quién designará el gobernador Barreto Sira para ocupar el cargo de Marcano, el nombre del médico Moisés Hernández figura entre los candidatos. El lunes 25 de mayo es muy probable que la ciudad conozca la resolución de esta situación que ocurre en plena pandemia del Covid-19.