Dos protestas simultáneas en los estados Anzoátegui y Nueva Esparta realizaron este miércoles 26 de junio trabajadores de Conferry, para exigir el pago de pasivos y beneficios laborales.
Alfredo Santamaría, representante sindical de la empresa de transporte marítimo, indicó que conocieron que la directiva de la naviera tramita la venta de los buques Rosa Eugenia, Concepción Mariño, Cacica Isabel y Carmen Ernestina.
Señaló el gremialista que a los 450 trabajadores activos y 200 jubilados les adeudan prestaciones sociales, fideicomiso, uniformes, útiles, plan vacacional y “otros beneficios dejados de percibir en esta administración”.
Santamaría apuntó que la masa laboral pide una auditoría para saber el uso de los recursos que genera la boletería del ferry Virgen del Valle II, único barco activo de Conferry.
También piden la incorporación de Conferry en la alianza entre el Instituto Nacional de Espacios Acuáticos (Inea) y la empresa privada Paruaganá.
Santamaría también denunció el desvalijamiento de los barcos Tallink Autoexpress II y Lilia Concepción antes de ser comercializados como chatarras.
Desde el terminal marítimo en el Puerto de Guanta, el vocero sindical detalló que cuatro motores, tres generadores y otros repuestos han sido sacados del autoexpress, del Lilia han retirado equipos y piezas como repuestos para reactivar el ferry Paraguaná I, que sería incorporado a la ruta Anzoátegui – Nueva Esparta.
Lo oficial. Sobre esta denuncia el presidente de Conferry, no se ha pronunciado, pero en enero de este año 2019 confirmó que el Tallink Autoexpres II, San Francisco de Asís y Cacica Isabel habían sido trasladados desde el estado Anzoátegui hasta los muelles de Bolipuertos, ubicados en Puerto Cabello, estado Carabobo.
El vocero de la empresa estatal de transporte marítimo también informó que el Virgen de Coromoto fue remolcado hasta los muelles de Diques y Astilleros Nacionales (Dianca).
Apuntó que el San Francisco y el Tallink fueron remolcados desde los muelles del Puerto de Guanta. El Cacica Isabel estaba anclado, convertido en chatarra, en el terminal Eulalia Buroz de Puerto La Cruz.
Herrera Balza anunció que la Corporación Ecosocialista Ezequiel Zamora (Corpoez) se encargaría de la comercialización de la chatarra ferrosa que resulte del desguace de los ferrys desincorporados.