La tensión continúa en México. Esta vez un grupo de maestros prendió fuego este miércoles a un edificio oficial en la ciudad mexicana de Chilpancingo, capital del convulso estado de Guerrero, en una demostración de protesta contra el gobierno por el caso de 43 jóvenes desaparecidos.
El martes los docentes prendieron fuego a la sede del partido oficialista PRI en la misma localidad de Chilpancingo, en esta ocasión contra la Contraloría de la Secretaría de Educación.
La agencia AFP reseña:
Unos 150 miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG), la mayoría encapuchados, destrozaron las instalaciones de la Contraloría y las prendieron fuego, sin que se hayan reportado heridos. El cuerpo de Bomberos llegó al lugar para tratar de sofocar el fuego.
Los maestros forman parte de una corriente radical del sindicato nacional y el año pasado ya habían llevado a cabo fuertes protestas para oponerse a una reforma educativa, en las que también incendiaron varias sedes de partidos e instituciones oficiales, incluida esta misma Contraloría.
Un vocero de los padres de los jóvenes desaparecidos, que exigen al gobierno que mantenga la búsqueda para encontrarlos con vida, se ha desligado de este tipo de acciones y ha denunciado que en las manifestaciones hay «infiltrados».
