Luego de 342 días que su hijo fue detenido, Luis Alberto García se encadenó en la cerca ubicada frente al Palacio de Justicia de El Tigre para exigir celeridad procesal. Al cabo de dos horas el hombre cesó la protesta luego de ser atendido por la jueza del Tribunal de Control Dos, Lilian Pérez.
Desde hace cinco meses su hijo se mantiene en los calabozos de la policía de Freites. La audiencia preliminar ha sido fijada tres veces y siempre ha sido diferida. Destacó que en la última oportunidad el fiscal Octavo que tiene a cargo la causa, no quiso realizar el acto procesal.
MÁS AFECTADOS POR RETARDO POLICIAL
Aprovechando la presencia de los medios de comunicación, Juan Pablo de Vera indicó que tiene un año acudiendo a la sede judicial para solicitar audiencia por un caso de agresión en su contra y siempre la difieren. “Ni una palabra con la juez” del Tribunal de Control Uno que lleva la causa, ha podido cruzar.
Por otra parte, Mario Guerrero también denunció que el tribunal le ha colocado «miles de trabas» para atender su caso en contra de la empresa Oxiviar con la que mantiene un litigio laboral. Manifestó que con la crisis económica que afecta el país se hace difícil pagar un abogado privado y costear los gastos de gestión del papeleo que le solicitan.
Héctor Hernández habló del caso de su cuñado. Andrés Eloy Carreño fue detenido hace 5 meses por presuntamente estar involucrado en el robo de una finca. Considera que el retardo procesal responde a que se trata de una persona indígena.