La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) espera que la demanda mundial de crudo repunte a partir de julio, con un aumento del 2,4% entre la primera y la segunda mitad de 2023, hasta situarse en una media de 103,25 millones de barriles diarios (mbd) en el último trimestre del año.
No obstante, en su informe mensual publicado este martes, la OPEP mantiene sin cambios sus principales pronósticos para todo el año, reseñó EFE.
Resalta que estas proyecciones están sujetas a múltiples incertidumbres, razón por la que justifica mantener su política de recortes de producción.
«Se prevé que la demanda mundial (de petróleo) crezca en 2,4 mbd en el segundo semestre de 2023», impulsada sobre todo por un mayor consumo en las economías emergentes, señala la OPEP en su informe.
La OPEP prevé que en todo 2023, el mundo quemará una media de 101,9 mbd, un 2,34% más que en 2022. Estas estimaciones no han variado con respecto a las hechas hace un mes.
También quedó sin cambios el cálculo sobre la cantidad de barriles que el mundo requerirá de los trece socios de la organización este año, cifrado en 29,3 mbd.