Exclusiva El Universal
El actual arzobispo de la Arquidiócesis de Mérida, Baltazar Enrique Porras Cardozo, de 72 años y que ha dedicado parte de su vida a ser uno de los dirigentes de la iglesia católica en el país, es consagrado este sábado cardenal de Venezuela por el papa Francisco en vísperas de la clausura del Jubileo Extraordinario de la Misericordia.
Para monseñor Jesús González de Zárate, obispo auxiliar de Caracas y secretario general de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), el nombramiento de monseñor Porras como cardenal significa una gran alegría y un reconocimiento de su amplia trayectoria pastoral, no solo de la iglesia de Mérida sino de Latinoamérica.
Esta decisión, dijo, también significa un reconocimiento del Sumo Pontífice al país, “un gesto de cariño a la iglesia de Venezuela”, dijo González de Zárate en entrevista exclusiva a El Universal.
De los 17 nuevos purpurados de este sábado, 13 de ellos electores procedentes de Latinoamérica, España, Estados Unidos y también de países periféricos, a juicio del Sumo Pontífice, es un gesto que significa la “universalidad de la Iglesia Católica”, y a su vez, manifiesta “el vínculo inseparable entre la sede de San Pedro y las iglesias particulares repartidas por todo el mundo”.
Diálogo en Venezuela
Baltazar Porras desde su nueva posición como cardenal, expresó monseñor González de Zárate, secundará las decisiones y medidas que tome la Santa Sede en el proceso de diálogo entre la oposición y el Gobierno, donde el Vaticano es mediador junto a la Unasur (Unión de las Naciones Suramericanas) a través de su secretario general Ernesto Samper y los expresidente José Luis Rodríguez Zapatero de España, Martín Torrijos de Panamá y Leonel Fernández de República Dominicana.