Jesús Andrés Quintero Olivero de 26 años, alias “badú”, privado de libertad del Internado Judicial José Antonio Anzoátegui, conocido como Puente Ayala, fue masacrado a tiros y puñaladas por otros reclusos, pasadas las 3:00 pm del lunes 1° de octubre.
Los reos habían organizado unos juegos en los espacios recreacionales del penal. Al parecer, el joven llegó a una de las canchas cuando Carlos Javier Vásquez (40 años), sacó un arma de fuego y le efectuó múltiples disparos en la cabeza, manos y brazos.
Acto seguido, el resto de los detenidos se ensañó contra la anatomía de “badú” y le propinaron más de 40 puñaladas, distribuidas en espalda, cuello, piernas, cabeza, brazos, causadas con machetes y otras armas blancas.
Se presume que Jesús Andrés “se comió la luz” con sus compañeros y por eso arremetieron en su contra.
Quintero estaba a la orden del Tribunal Tercero de Control del Área Metropolitana de Caracas y lo habían remitido a la cárcel ubicada en la capital anzoatiguense.
Se pudo conocer que Vásquez paga condena por narcotráfico y fue aprehendido en abril de este año después de que funcionarios del Comando Antidrogas de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) realizaron un allanamiento en una vivienda en el sector Pueblo Viejo de Lechería, donde incautaron 239 kilogramos de marihuana y cocaína.
Más datos: Los restos del reo que tenía tatuado en el brazo izquierdo “Badú para lo que salga” y en el brazo derecho “el carro que nunca duerme”, fueron trasladados hasta la morgue del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf), ubicada en Tronconal III de Barcelona. El actual pran de Puente Ayala es conocido como “pata de queso”.
