Durante su intervención en la 73 Asamblea General de Naciones Unidas, el presidente Nicolás Maduro aseguró que está dispuesto a hablar con su homólogo Donald Trump «de todos los temas que quiera hablar EEUU». Solicitó al organismo internacional la designación de un delegado especial para investigar el atentado del 4 de agosto.
«Qué bueno sería que Estados Unidos y el FBI se incorporen a esta investigación y esclarezcan con la justicia venezolana, la verdad», expresó luego de mencionar la publicación del New York Times en la que se revelaron contactos entre militares venezolanos inactivos y funcionarios norteamericanos con supuestas intenciones de derrocarlo.
«Luego de la publicación del fracaso, de intentos pretendidos de disturbios y violencia en el que se dan detalles de cómo desde Colombia ofrecieron su aliento y apoyo a este intento de cambio de régimen (…) puede Latinoamérica y el Caribe aceptar estos métodos que tanto daño hicieron durante todo el siglo XX?», cuestionó.
«Ratifico desde esta tribuna, a pesar de las inmensas diferencias históricas, ideológicas, soy un obrero no soy un magnate, a pesar de esas diferencias, estaría dispuesto a estrechar la mano del presidente de Estados Unidos para hablar los asuntos de la región que sean considerados». Maduro aseguró que Venezuela es un país amigable, de tradición pacífica. «Los venezolanos no odiamos los EEUU, al contrario, apreciamos su cultura, su arte, su sociedad», añadió.