Al acto asisten Ramón Muchacho, David Smolansky y Gustavo Marcano, alcaldes en el exilio. La pianista venezolana radicada en el exterior, Gabriela Montero, participó en la instalación.
Con información de EFE.- El Tribunal Supremo de Justicia nombrado por el Parlamento venezolano, de mayoría opositora, inició su ceremonia de “instalación” en el Salón de las Américas, el gran salón de actos de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Aunque la OEA no envió ninguna convocatoria para el evento, su secretario general, Luis Almagro, asiste hoy al acto de “instalación del Supremo” pese al malestar que ha causado esta iniciativa sin precedentes entre los Estados miembros, incluso entre los críticos con el presidente Nicolás Maduro.
El Parlamento venezolano designó en julio a 33 magistrados para el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), con la idea de que reemplacen a 33 jueces en ejercicio de esa instancia, al considerar que están al servicio del Gobierno y que fueron nombrados con graves irregularidades.
Almagro fue recibido con una gran ovación de las decenas de asistentes.
Los magistrados fueron subiendo uno a uno al palco del salón, en el que hoy no están las banderas de los 35 Estados miembros ni el cartel con el logotipo de la OEA. El evento comenzó con el himno nacional de Venezuela y el grito más oído entre los asistentes, algunos con banderas de Venezuela, ha sido: “¡Justicia!”.
Los jueces nombrados por la oposición llevan más de dos meses perseguidos por la justicia, refugiándose en embajadas en Caracas, exiliándose en otros países y uno de ellos en prisión domiciliaria en Venezuela. “Como un mecanismo de presión internacional contra la dictadura instaurada en Venezuela, se decidió de manera inédita instalar un Tribunal Supremo de Justicia en el exilio”, explican los magistrados en la nota que enviaron a la prensa.