Desde la Federación Interamericana de Abogados (FIA), su vocera, Alejandra Olivares, levantó la voz para denunciar el proceso de liberación de los presos políticos al calificarlo como “chucuto y politizado”.
La defensora de Derechos Humanos precisó que desde el seno de la Organización No Gubernamental (ONG) se le exigió al Gobierno nacional el sobreseimiento de causa de perseguidos políticos.
«Si quieren en verdad, hacer un efectivo gesto de rectificación y reconciliación ante los atropellos que han cometido entonces, si en verdad tienen tan buena disposición, dicten el sobreseimiento de las causas, cierren las mismas«. Olivares indicó que el proceso que conllevó la excarcelación fue producto de las presiones internacionales y del papel que jugaron ONG’s nacionales e internacionales.
Aseveró que se mantiene una espada de Damocles sobre la cabeza de los dirigentes perseguidos para que éstos no puedan disfrutar de sus derechos constitucionales. «Quieren seguir maniatando a la dirigencia empleando medidas cautelares, siguen sometiendo a los dirigentes a restricciones políticas».
Olivares precisó que lo que realizó el Gobierno nacional fue darle libertad a unos secuestrados. “Daniel Ceballos, Giber Caro, Ángel Vivas, y tantos más, no eran simples privados de libertad sino que eran rehenes, y lo siguen siendo”.