No se puede ni con una orden judicial. El periodista especializado en telecomunicaciones, William Peña, afirmó que desde el punto de vista técnico, el gobierno de Nicolás Maduro no puede restituir la señal de DirecTV Venezuela con los equipos de AT&T, compañía dueña de la firma de televisión satelital por suscripción.
En entrevista con Efecto Cocuyo este viernes, 22 de mayo, el comunicador explicó que aunque el Gobierno tuviera un equipo técnico para penetrar el software de la empresa estadounidense, AT&T puede bloquear los códigos (el corazón del equipo) asociados a los decodificadores para inutilizar los aparatos. De igual forma, para lograr esto tendrían que confiscar máquinas, cambiar software y otros procesos informáticos que son, prácticamente, imposibles.
El pasado martes 19 de mayo, AT&T anunció el cierre inmediato de las operaciones de DirecTV Venezuela por no poder cumplir con los requisitos legales estadounidenses en medio de las sanciones, ni poder cumplir en paralelo la exigencia de Conatel de incluir en su oferta dos canales pertenecientes a empresas sancionadas.
Este viernes, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), ordenó la ocupación de DirecTV Venezuela, registrada como Galaxy Entertainment de Venezuela C.A., y la restitución “inmediata” del servicio de televisión por suscripción.
No es tan sencillo
Al respecto, Peña señaló que la televisión por suscripción es un negocio con aristas muy diferentes si se compara con las empresas de compra y venta de bienes (que el gobierno ha tomado en otras oportunidades).
Directv Venezuela es una distribuidora de señal. Prestan una plataforma para que los programadores de contenidos puedan mostrar su oferta a través de sus pantallas. Para poder ofrecer canales internacionales, la nueva directiva tendría que contratar y negociar con cada una de esas televisoras para comprar los derechos y trasmitir. A partir de allí, deben seguir todo el marco legal que implica tener esos derechos de difusión. Las sanciones podrían ser un obstáculo para cumplir este objetivo.
Señaló que la mayor parte del país no cuenta con televisión analógica (que solo transmita canales nacionales), razón por la que la pérdida de DirecTV representa una desconexión importante. Más de 2 millones de usuarios de la televisión paga en el país (más de 45% del mercado) quedaron sin servicio, según datos de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), citados por la Cámara de Televisión por Suscripción (Cavetesu). Con información de Efecto Cocuyo.