Información de Kevin Arteaga González, periodista de El Carabobeño.
En horas de la mañana de este miércoles trascendió en las redes sociales un video en el que se hace referencia a un supuesto incendio en las instalaciones de Pdvsa El Palito, ubicadas en Puerto Cabello, Carabobo. Ante esta situación, el ex secretario general del sindicado la refinería, Diésbalo Espinoza, aclaró que no se trata de un siniestro sino de la quema de los desechos derivados de la torre de destilación.
En entrevista con El Carabobeño, Espinoza explicó que la quema de los residuos acumulados en la planta de destilación solo demuestra que en El Palito no se está produciendo ningún componente de la gasolina, ya que los mechurrios de la planta de craqueo catalítico en lecho fluido (FCC, por sus siglas en inglés), fundamental para la producción de combustible, permanecen apagados.
A su juicio, bajo esas condiciones “lo único que quizá logren producir sea gasoil fuera de especificaciones”. Agregó además, que para poder obtener los derivados completos necesarios en la producción de gasolina, deben arrancar todas las plantas en simultáneo “y lamentablemente no tienen la capacidad técnica para lograrlo”.
Otra fuente que prefirió no identificarse confirmó la versión de Espinoza. Las llamas no corresponden a un incendio en la refinería carabobeña, sino a la quema en la laguna de oxidación que está “muy cerca del mar” de los desechos provenientes de la torres de destilación, la cual tenía más de tres años sin uso.
Este martes el secretario de la Federación Unitaria de trabajadores del Petróleo de Venezuela, Iván Freites, señaló que el complejo refinador de El Palito reanudó parcialmente sus operaciones el pasado viernes 10 de abril, luego de reactivar la planta destiladora de crudo. Sin embargo, esta no produce gasolina, sino destilados que requieren un proceso de conversión media a través del FCC.
Esto representa una gran traba para la producción de gasolina, ya que la planta de FCC colapsó en 2017 y desde entonces está parada. Aunque han intentado ponerla en servicio, no lo han logrado debido a los profundos daños que le fueron ocasionados entre 2009 y 2011 en un intento de ampliación bajo la gestión de Rafael Ramírez, apuntó Freites.
Entretanto, la aguda escasez de combustible se mantiene en la entidad carabobeña y el resto del país. En medio de la pandemia de la COVID-19, los venezolanos deben incumplir el distanciamiento social para hacer largas filas a las afueras de las estaciones de servicio y esperar durante horas o incluso días para, con suerte, lograr abastecer sus vehículos.
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