El primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, decretó emergencia en varias regiones del país por los recientes hechos violentos ocasionados por pandillas delictivas.
“Se ha declarado un estado de emergencia pública en las parroquias de Clarendon, St. Catherine y áreas específicas de Kingston y St. Andrew. También se ha declarado un estado de emergencia pública en el oeste de Jamaica que comprende las parroquias de St. James, Westmoreland y Hanover”, indicó Holness en una alocución el 15 de noviembre.
“Hemos visto un aumento en la actividad delictiva en estas áreas y, ciertamente, una amenaza a la propiedad y, en algunos casos, desorden público. Es importante señalar que también nos acercamos a la temporada navideña y esto requerirá del despliegue de recursos aún mayores”, afirmando el motivo por el cual decidieron hacer un frente urgente a la situación.