El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha decretado este lunes siete días de luto nacional debido a los fuertes terremotos que han sacudido el país y que han dejado ya más de 1.600 muertos y 11.000 heridos en diez provincias afectadas, reseña Europa Press.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés) ubicó el epicentro del sismo de intensidad 7.8 a unos 23 kilómetros al este de la ciudad turca de Nurdagi, en la provincia de Gaziantep. El primer movimiento telúrico se registró a las 2:17 de la madrugada del lunes 6 de febrero. Nueve horas después se registró otro se similar potencia, además de numerosas réplicas de mediana y baja intensidad.
Por esta tragedia, hasta el 12 de enero la bandera nacional ondeará a media asta no solo en territorio turco, sino también en las sedes diplomáticas en el extranjero.
El ministro de Educación, Mahmut Ozer, ha informado de la suspensión de las clases en todas las escuelas del país hasta el próximo día 13 de febrero, si bien en la principal provincia afectada, Kahramanmaras, la suspensión será de dos semanas, recoge la agencia Anatolia.
Cerca de 2.600 personas han muerto por la sucesión de terremotos registrados este lunes en el sur de Turquía, cerca de la frontera con Siria, según datos facilitados por las autoridades de ambos países y los ‘cascos blancos’ que atienden en zonas opositoras sirias.
En un primer avance publicado en El Vistazo, detallamos que el potente sismo se sintió en varios países como Líbano, Chipre, Irak, Israel, Grecia y Egipto.
