Leocenis García
El Sebin 6 de mayo de 2015
El país conoce mi fe en Dios y en Miguel el Arcángel. Cuando hace dos semanas levante la huelga de hambre que mantenía en el Sebin sede de la policía política en Venezuela, lo hice confiando en la palabra de un General de la República Bolivariana de Venezuela, que sirvió como mediador de la situación y me pidió el levantamiento de dicha huelga, el cual lo hice. De ese General soy amigo.
Hoy las circunstancias demuestran que tal mediación, al parecer, no cumplió sus efectos, hoy se ha dejado en la calle a mi familia y a decenas de trabajadores del Grupo 6to Poder, que comprenden las marcas El Heraldo, 6to Poder, El Comercio, Revista U-sex y 6to Poder Libros. Cometiéndose así un atentado terrible contra la libertad de expresión y la libertad de empresas , se ha cerrado por la fuerza el Grupo 6to Poder, que tal como consta en el registro mercantil de la administradora de esas marcas, no me pertenecen, peor aún, se incautan bienes que nada tienen que ver con el juicio que se me sigue, juicio que por cierto la supuesta legitimación de capitales, se probaba con una experticia financiera promovida por la fiscal Narda Sanabria, que una sala de apelaciones declaró sin lugar y extemporánea, es decir para los que lean este comunicado puedan entender, es como que si se quisiera probar un homicidio sin muerto.
A 6to Poder se le acusa de estar con un sector o con otro, pero el Grupo 6to Poder siempre ha estado con todas voces y sobre todo con la democracia. Perdono a mis enemigos y en Miguel el Arcangel coloco su vida, retomo de nuevo mi huelga de hambre, no creo que esta vez vaya a sobrevivir, pero sepan que siempre 6to Poder, el grupo editorial que nos enorgullecemos de haber fundado, fue la casa de todos los venezolanos, de los chavistas y los antichavistas, los empresarios y los obreros, los intelectuales y el pueblo llano, de los maestros y los estudiantes, en fin de los que nunca tenían voz, porque un medio no puede ser vocero del Gobierno, ni de la oposición sino de la gente, de los ciudadanos, de sus lectores.
Mi padre en contra de mi voluntad ha empezado una huelga de hambre frente a la Asamblea Nacional, a los que decían que yo era un protegido de supuestos intereses del Gobierno aquí me tienen preso en el Sebin, próximo a morir, para los que decían que yo era un conspirador, una suerte de militante de la oposición allí tienen mi teléfono incautado por la fiscalía, nada han encontrado contra mí, ni una conversación nada que me pueda vincular a una conspiración en Venezuela porque mi único compromiso es con la democracia, con mi familia, con mi país y con la empresa Editorial 6to Poder, he vivido a mi manera, quizás esta sea la última vez que hable con los venezolanos, ame este país y morí luchando de píe morí por lo que creí, Dios me dará la victoria en la otra vida
Leocenis García
El Sebin 6 de mayo de 2015
