Autoridades de Colombia solicitaron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), medidas cautelares que impidan que Venezuela ordene nuevas deportaciones de colombianos y se respeten sus derechos humanos.
«Hemos decidido solicitar formalmente a la CIDH unas medidas cautelares para que dé las instrucciones a Venezuela de no continuar con esa violación sistemática de los derechos humanos», dijo el Defensor colombiano del Pueblo, Jorge Otálora.
La presencia del Defensor colombiano en el órgano autónomo de derechos humanos de la Organización de Estados Americanos (OEA), es producto de la crisis en la frontera colombo-venezolana, generada luego que Caracas deportara en tres semanas a 1.300 colombianos, al tiempo que decretó un estado de excepción en varios municipios limítrofes.
Otros 10.000 colombianos han cruzado la frontera por temor a ser expulsados sin sus familias y pertenencias, según la Organización de Naciones Unidas.
Los derechos de los deportados a la unidad familiar, la movilidad, el trabajo y la propiedad fueron violados, señaló el Defensor.
Agregó que la importante comunidad de colombianos que reside en el lado venezolano de la enorme frontera común vive bajo la amenaza de seguir el mismo camino y por eso pidió la intervención de la CIDH, con sede en Washington.
La CIDH debe instar a Caracas a que «no continúe con la sistemática violación de los derechos humanos de los colombianos que hoy continúan en Venezuela», apuntó, sin precisar su número.