Comunicado Oficial
Comunicado del Colegio Nacional de Periodistas
Venezuela: de la emergencia a la urgencia
Somos testigos de la crisis institucional, social, política y económica más grave que ha atravesado nuestro país en toda su historia y como gremio profesional sería sumamente grave obviarlo.
Venezuela parece un barco sin timón que avanza a increíble velocidad hacia el vacío. Los hechos de anarquía y violencia desatados en el estado Bolívar y otros estados del país, así lo confirman. Todo ello como consecuencia de las erráticas medidas económicas y políticas asumidas por el Ejecutivo Nacional, ante la mirada cómplice del resto de los Poderes Públicos.
La salida de circulación de nuestra moneda de mayor denominación y su restitución improvisada se han constituido en detonante de una crisis social anunciada desde hace varios años por distintos expertos en el área económica que habrían podido corregirse de no ser por la falta de voluntad de los actores involucrados.
La ausencia de información veraz en los principales medios de comunicación nacionales agrava el clima de zozobra generalizado que deviene en cadenas de rumores que en nada favorecen a la población.
Ante esta situación hacemos un llamado urgente:
A las autoridades gubernamentales a retomar el hilo constitucional fragmentado, a las autoridades del Tribunal Supremo de Justicia a respetar las competencias correspondientes a la Asamblea Nacional.
Al Presidente de la República a respetar los diferentes criterios y redireccionar las políticas económicas hasta tanto se produzca una salida electoral que permita dar una respuesta a la crisis institucional.
A las Fuerzas Armadas Bolivarianas a ser garantes de la Constitución. En todo su articulado, en especial el artículo 328 que reza “La Fuerza Armada Nacional constituye una institución esencialmente profesional, sin militancia política, organizada por el Estado para garantizar la independencia y soberanía de la Nación y asegurar la integridad del espacio geográfico, mediante la defensa militar, la cooperación en el mantenimiento del orden interno y la participación activa en el desarrollo nacional, de acuerdo con esta Constitución y con la ley. En el cumplimiento de sus funciones, está al servicio exclusivo de la Nación y en ningún caso al de persona o parcialidad política alguna”.
A la oposición venezolana a unificar criterios y convertirse en verdaderos líderes que permitan el intercambio efectivo de propuestas políticas, dejando a un lado aspiraciones particulares, para dar paso a una visión en conjunto por el bien del país.
A los medios de comunicación a asumir de una vez por todas, su papel de informar a la ciudadanía, dejando atrás el miedo y disolver la cruenta censura gubernamental que los ha llevado a la autocensura que los aleja de su papel natural.
A nuestros agremiados a ejercer con responsabilidad su papel como garantes de la Democracia, a cumplir con el Código de Ética del Periodista Venezolano a no hacerse eco de rumores y verificar la información recibida por diferentes fuentes antes de publicarla. A exigirles a sus jefes a cumplir con el deber de informar, tal como lo demanda la Ley de Ejercicio del Periodismo y el Código de Ética del Periodista Venezolano.
Y al pueblo venezolano en general a no claudicar. Los trágicos procesos históricos terminan irremediablemente en procesos de cambio y reconstrucción, y Venezuela no ha de ser la excepción. Venezuela ha de salir inevitablemente de esta crisis para dar paso a una Nación pujante, siempre y cuando no dejemos que nos la arrebaten de las manos.
Para finalizar, aprovechamos para hacernos solidarios con los directivos de nuestras seccionales que han sido objeto de robos haciendo más cuesta arriba nuestro trabajo. Denunciamos que varias de nuestras seccionales, entre ellas: Lara, Paraguaná, Cojedes, Carabobo, Anzoátegui y Nueva Esparta han sido objeto de los embates del hampa durante este año, razón por la cual exigimos el apoyo de los organismos de seguridad del Estado.
Que esta Navidad sea época de rectificación, reflexión y enmienda, seamos solidarios con nuestros hermanos que ante la debacle económica carecen de alimentos y ropa, sobre todo con aquellos niños inocentes en cuyos hogares no hay sustento que cubra el maltratado presupuesto familiar.
Junta Directiva Nacional