Marta Pinto, directora de la Unidad Educativa Miguel Otero Silva, denunció condiciones precarias en la institución que tiene una matrícula de 600 alumnos.
Indicó que el prescolar está colapsado desde el año 2017. «Tuvimos que cambiar a los niños para otro espacio que no es el adecuado. En total son 55 niños de los turnos mañana y tarde que están afectados». En la actualidad, también hay 4 aulas con filtraciones considerables en el techo y esto ocasiona daños en el mobiliario.
Refirió Pinto que funcionarios de la Gobernación de Anzoátegui han hecho acto de presencia en varias oportunidades pero aún el gobierno estatal no cuenta con los recursos para la rehabilitación. Agregó la docente que además del problema estructural los docentes no están recibiendo a los alumnos como medida de protesta por la falta de homologación de salarios. Lee también: «De brazos caídos» los docentes del sur de Anzoátegui