Un grupo de 25 opositores, entre ellos académicos, empresarios, periodistas, defensores de Derechos Humanos, políticos y economistas que hacen vida en Venezuela solicitaron a través de una carta pública al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que alivie las sanciones contra Venezuela.
El documento publicado en redes sociales por el periodista de la agencia The Associated Press (AP), Joshua Goodman el 14 de abril como reseña Globovisión, expresa que la política de máxima presión y las sanciones impuestas por EEUU contra la Administración de Nicolás Maduro «no lograron sus objetivos». Instaron al gobierno estadounidense a negociar en «beneficio del pueblo venezolano y que supere las presiones políticas internas (norteamericanas) que lamentablemente han obstaculizado el proceso», describe el texto.
“Llamamos al gobierno de Estados Unidos a que continúe promoviendo negociaciones sustantivas y productivas para resolver la crisis venezolana y urgimos al gobierno de Venezuela, a los partidos políticos de oposición y a la Plataforma Unitaria a reanudar las negociaciones sin dilaciones”, reza la carta abierta dirigida a Biden.
El texto está suscrito por los economistas Luis Oliveros, José Guerra, Luis Vicente León; el empresario y expresidente de Fedecámaras, Ricardo Cusanno; el sociólogo José Gil Yepes; el gerente general de El Nacional, Jorge Makriniotis, y el dirigente sindical Pablo Zambrano.
También aparecen Alejandro Sucre, Alfredo Padilla, Andrés Rojas, Blanca Vera Azaf, Feliciano Reyna, Francisco Rodríguez, Jorge Botti, José Manuel Puente, Juan Ernesto Aguilera, Leída Marcela León, Manuel Sutherland, Marianela Herrera, Mariela Ramírez, Michael Penfold, Rafael Quiroz, Reinaldo Quintero, Tamara Herrera y Víctor Álvarez.
«Pedimos acuerdos que permitan la vuelta a las compañías petroleras occidentales y a otras empresas privadas para regenerar el sector petrolero venezolano. Esto creará puestos de trabajo y promoverá el desarrollo local. El gobierno venezolano debe permitir que estas empresas gestionen sus proyectos y sus contratistas, así como los ingresos de las exportaciones, al tiempo que reciben las correspondientes regalías e impuestos. Las empresas aportarán la tecnología y el capital que tanto necesita el sector», agrega la carta.