Sectores del transporte como el de pasajeros paralizaron el jueves sus actividades en Ecuador en rechazo al alza de hasta 123% de los precios de los combustibles, cuyos millonarios subsidios fueron eliminados por el gobierno tras un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Hoy el Ecuador está viendo cómo un grupo particular defiende sus intereses y paraliza el país”, lamentó el ministro de Economía, Richard Martínez, añadiendo que “lo que estamos haciendo es sincerar los precios, retirar un subsidio, un regalo que estaba haciendo el Estado”.
Ante la paralización de “algunos gremios del transporte”, el Ejecutivo suspendió las clases. “¡Rechazamos este tipo de medidas!”, expresó el miércoles la presidencia en un comunicado.
La falta de autobuses y taxis en Quito pudo ser verificada por la AFP en un recorrido del jueves por la mañana. En el sur de la ciudad había bloqueo de vías con llantas encendidas.
“Mientras no se dé marcha atrás en las alzas de los combustibles, nosotros no dejaremos de protestar”, dijo Carlos Guzmán, dirigente de una cooperativa de taxis que se manifestaba en La Marín, en el centro viejo de la capital.
Miles de pasajeros se las ingeniaban para movilizarse a través del sistema municipal de transporte, que operaba con normalidad, pero es insuficiente.
La cotización del galón americano de diésel pasó el jueves de 1,03 dólares a 2,30 dólares y la de gasolina corriente, de 1,85 a 2,40 dólares, comprobó la AFP en surtidoras de Quito.
Los precios quedaron sujetos a los del mercado una vez que el presidente Lenín Moreno eliminara el martes los subsidios para esos combustibles, que demandaban unos 1.300 millones de dólares al año. Hace un año ya liberó el de la gasolina premium, que ahora cuesta 3,15 dólares el galón. Con información de AFP