EFE. El portavoz de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Babar Baloch, destacó que la desaparición de al menos veintiún personas en el naufragio de una embarcación con emigrantes venezolanos que intentaban llegar a Trinidad y Tobago demuestra que «si no hay rutas legales, habrá más personas que usen vías más peligrosas».
El suceso ocurrido en la noche del miércoles «ejemplifica los peligros de las salidas irregulares de gente que intenta pasar de unos países a otros», destacó el portavoz del ACNUR, en rueda de prensa en Ginebra.
Baloch recordó que no es el primer incidente de este tipo que se produce en el Caribe, donde en enero del pasado año otra embarcación con venezolanos que intentaban llegar a la isla de Curazao naufragó con una treintena de personas a bordo, de las que sólo pudieron ser rescatadas 16.
El portavoz de ACNUR destacó que entre 40.000 y 60.000 venezolanos han emigrado al cercano país insular de Trinidad y Tobago, a consecuencia de la crisis económica y política que vive Venezuela. Representan una pequeña parte de los más de 3,7 millones de personas que han dejado el país en los últimos años.
El portavoz añadió que los cuatro rescatados -aunque algunas fuentes hablan de nueve- regresaron a Venezuela.