«Desde que inició la cuarentena en Venezuela, y dada la distorsión entre inflación y devaluación, los precios expresados en dólares de los alimentos han subido un 23 %, basados en los datos que recopila @ecoanalitica».
La afirmación del economista Asdrúbal Oliveros, pone en perspectiva que la hiperinflación en Venezuela es un fenómeno que en modo alguno ha desaparecido, probablemente sí se haya ralentizado.
El pasado fin de semana, se aseguró que Venezuela «salió de la hiperinflación», en palabras de Delcy Rodríguez, vicepresidenta de la República.
«Veníamos de una inflación terrible. Hoy todavía Venezuela padece inflación. Pero salimos del mecanismo de hiperinflación, números que sin duda alguna, siguen impactando», declaró Rodríguez.
A diferencia del Gobierno, los datos de la empresa Ecoanalítica indican que desde que comenzó la cuarentena en Venezuela en marzo pasado, los precios de los bienes y servicios han subido un 461,4 %. Mientras que 671% se han acelerado los precios de alimentos, esto en cuanto a los precios expresados en bolívares.
La aceleración de los precios es de tal magnitud que en un reciente sondeo, 74,1% de los habitantes de la capital de Venezuela dijo que consume menos alimentos que en diciembre del 2019, en medio de una crisis agravada por la pandemia de Covid-19.
Se considera que Venezuela entró en un ciclo de hiperinflación en noviembre de 2017. Durante el Gobierno de Nicolás Maduro (desde 2013), ha sido frecuente el vacío de data económica oficial del BCV durante largos períodos (hasta de tres años).
¿Inflación o apreciación real de la moneda?
Un análisis del Iesa, firmado por Omar Mendoza, asegura que «lo que se ha señalado en tiempos recientes como inflación en dólares, en estricto sentido, implica la pérdida de poder adquisitivo de la moneda estadounidense en el mercado venezolano, como consecuencia de un incremento de los precios mayor que el del tipo de cambio nominal. En este entorno se requiere una cantidad mayor de dólares para obtener una unidad de producto en el mercado venezolano. Este comportamiento, evidenciado en los precios en moneda extranjera de productos que se expenden en el mercado nacional, está estrictamente asociado al desempeño del tipo de cambio real; esto es, a una situación de apreciación real en una economía que enfrenta cierto grado de dolarización».
En este sentido se está dando una apreciación del tipo de cambio real y hay precios que suben por encima de la inflación. Acotó que, esto es un fenómeno que ha ocurrido en las postrimerías de los fenómenos hiperinflacionarios cuando el tipo de cambio se estanca y los precios siguen su camino al alza. Con información de Panorama.