15/03/2020. DIOCESIS DE El TIGRE, segundo comunicado oficial de monseñor José Manuel Romero Barrios, obispo de la Diócesis de El Tigre.
“Si el Señor no guarda la ciudad, en vano vigilan los centinelas; si el Señor no construye la casa, en vano se cansan los albañiles” (Salmo 127,1 ).
A los estimados hermanos Presbíteros, miembros de la Vida Consagrada, Diácono, Fieles Laicos, seminaristas, hombres y mujeres de buena voluntad, los medios de comunicación social, las redes sociales nos informan que la situación a nivel mundial es extremadamente difícil debido a la rápida expansión del flagelo del Coronavirus en numerosos países.
Los discípulos del Señor Jesús creemos firmemente que Él es el centro del cosmos y de la historia; que es el Principio y Fin, el Alfa y la Omega; en toda circunstancia, favorable o adversa, camina con nosotros porque es el “Emmanuel” (Dios-con-nosotros) (cfr. Is. 7,14 Mt. 1,23); El enjuga nuestras lágrimas. Compartimos los gozos y esperanzas, las angustias y tristezas de todas las personas, especialmente de las más pobres y necesitadas. Esta pandemia ha sobrepasado las proyecciones iniciales y está poniendo a prueba la capacidad de los servicios de salud y, sobre todo, está permitiéndonos desarrollar y globalizar la solidaridad en la entrega desinteresada de tanto voluntarios, del personal de los centros de salud, de los medios de comunicación social, los cuales hacen su mejor labor en la transmisión de la información.
Como ciudadanos y ciudadanas estamos llamados a acatar y seguir las medidas dispuestas por las autoridades civiles en orden a la contención de la propagación del virus y colaborar en todo lo que esté a nuestro alcance para difundir las medidas sanitarias tendientes a evitar la difusión de este flagelo como un gesto de caridad. Es importante que no nos hagamos eco de rumores y evitemos el pánico, realizando compras nerviosas
Las autoridades nacionales han informado la presencia en el país de personas contagiadas por el virus (COVID-19); esta realidad nos ha motivado a consultar al presbiterio y a redactar este nuevo comunicado.
En nuestra Diócesis hemos dispuesto lo siguiente:
- Suspendemos la celebración de la Santa Misa desde el lunes 16 de marzo hasta el viernes 03 de abril. La Comisión Diocesana de la Pastoral de la Comunicación está realizando gestiones para transmitir la santa misa dominical por los medios de comunicación social y las redes sociales. Avisaremos oportunamente el resultado de estas gestiones.
- Mantenemos nuestros templos abiertos para que los fieles puedan acudir a orar ante el Señor Jesús sacramentado.
- Los párrocos estarán siempre disponibles para atender a las personas, siguiendo las normas sanitarias de prevención emitidas por las autoridades civiles.
- Suspensión de los encuentros itinerarios catequísticos tanto de asultos como de niños, así como la realización del Vía Crucis Diocesano, las Jornadas comunitarias del Sacramento de la Reconciliación, el Diezmo Misionero del mes de marzo.
- La realización de los Vía Crucis parroquiales lo dejamos a la disposición de los párrocos, sugiriendo que no se realicen.
- Se suspende la fiesta y la procesión de San José. Dios Padre, permitiéndolo, esperamos celebrarla el 01 de mayo, Día de San José Obrero.
En cuanto a las celebraciones de la Semana Mayor, en su debido momento daremos las indicaciones respectivas, sugiriendo que se vaya indicando que sufrirán algunos cambios pero que no se puede suspender por cuanto es el gozne del Año Litúrgico, “durante la Semana Santa la Iglesia celebra los misterios de la salvación actuados por Cristo en los últimos días de su vida, desde la entrada mesiánica en Jerusalén hasta su santa Pasión y gloriosa Resurrección” (Calendario Litúrgico).
Nos unimos a la exhortación de la Presidencia de nuestra Conferencia Episcopal para que el próximo jueves 19 de marzo, Solemnidad de San José, Patrono y Protector de la Iglesia Universal, nos unamos en una gran jornada de oración desde los lugares donde se encuentre cada uno, pero principalmente en la familia, en la casa, para que Venezuela y el mundo entero sea librado de esta pandemia.
Como discípulos misioneros, los fieles cristianos católicos estamos llamados a perseverar en la oración junto con María la Madre de Jesús (cfr. Hechos 1,14) y a practicar la solidaridad con los enfermos.
Con mi afecto y cariñosa bendición de pastor,
+José Manuel Romero Barrios, 1º Obicpo de la Diócesis de El Tigre.