El Tribunal Supremo Electoral de Bolivia informó el jueves que se repetirá la votación presidencial en cinco mesas de la región amazónica del Beni por irregularidades, lo que demoraría aún más el resultado final de los comicios presidenciales.
La votación en las cinco mesas impugnadas, que representan un 0.01% del total, se hará el 3 de noviembre, dijo el TSE. Según el organismo, la tendencia actual no cambiará.
Con el 99,98% de las actas escrutadas, el presidente Evo Morales obtenía 47,08% de los votos mientras que su principal rival, el expresidente Carlos Mesa, alcanzaba el 36,51%. El jueves Morales se declaró ganador de los comicios mientras el país vive jornadas de protestas que incluyeron la quema de varios tribunales electorales regionales.
En el cuarto día de protestas, oficialistas y opositores se enfrentaron en una barriada en la región oriental de Santa Cruz y en el centro de la ciudad de Cochabamba, dejando algunos heridos. En La Paz, manifestantes asediaron el TSE, pero fueron repelidos por la policía. En las regiones sureñas de Potosí y Tarija, los grupos antigubernamentales mantenían cortadas varias rutas.
Horas antes, Europa pidió celebrar una segunda vuelta electoral entre Morales y Mesa.
“La Unión Europea comparte la evaluación de la OEA... la mejor opción sería realizar una segunda vuelta para restablecer la confianza y asegurar el respeto pleno a las elecciones democráticas del pueblo boliviano”, dijo a su vez el bloque en un comunicado y llamó “a las partes a abstenerse de la violencia”.
A la presión internacional se sumaron Estados Unidos, Brasil, Argentina y Colombia, que en un comunicado difundido por la cancillería colombiana anticiparon que “sólo reconocerán resultados que reflejen la voluntad del pueblo boliviano”. Con información de AP