En rueda de prensa realizada la mañana de este martes 3 de septiembre, la directora del hospital Felipe Guevara Rojas de El Tigre, Yindri Marcano, señaló que la situación del centro asistencial es cada día más crítica. Reconoció que no están en la capacidad de atender a los pacientes en las áreas de emergencia de adultos y emergencia pediátrica, ni tampoco para asumir las intervenciones quirúrgicas. Menciona la falta de insumos, mantenimiento, medicamentos y la diáspora del personal, como las causas del colapso del principal centro asistencial de la zona sur de Anzoátegui, que además recibe pacientes de Monagas y Bolívar.
Marcano destacó que este lunes se reunió con los jefes de servicio y coordinadores de áreas, para tomar algunas decisiones respecto al funcionamiento del hospital. “No podemos ofertar un servicio médico que no somos capaces de dar”, afirmó.
Indicó que un cirujano atenderá de lunes a viernes en horas de la mañana, las cirugías que se puedan aplazar serán aplazadas, otras se van a referir; mientras que en el servicio de emergencia van a concentrar el mayor número de especialistas, ya que actualmente hay 36 pacientes, algunos de ellos reposan en sillas. En este servicio sólo hay un residente y un médico por guardia.
El pasado 30 de agosto a propósito de conmemorarse el 51 aniversario del hospital, Marcano mostró «una radiografía» alarmante del déficit de trabajadores de la salud: Actualmente se requieren al menos 180 médicos, entre especialistas y residentes, además de 200 enfermeros, para cubrir la atención. “En Medicina Interna hay un solo médico, en el área de cirugía igual y de los 12 anestesiólogos que debería tener el hospital, hay solamente cuatro”, describió.
En esa primera rueda de prensa hecha hace menos de una semana, la directora también explicó que tienen problemas de mantenimiento, el suministro de agua potable que se recibe es sólo por horas, no hay calderas para la esterilización de compresas, hay problemas de climatización e impermeabilización, además están esperando la instalación de una planta eléctrica donada por Caritas Venezuela.
Hoy en día sólo están llegando medicinas orales para pacientes crónicos, hipertensos, diabéticos y tiroideos, pero no hay suministro de analgésicos, antibióticos, antipiréticos y anticonvulsivos, ni yelcos, adhesivos o gasas y soluciones fisiológicas.
Este martes la médico nefrólogo sumó la inexistencia de un ascensor para trasladar a los pacientes de la Unidad de Terapia Intensiva, pues no ha recibido apoyo de algún organismo de gobierno, regional o local. Hizo énfasis que las estructuras del hospital necesitan un mantenimiento constante, “no hay una impermeabilización apropiada y solamente en las emergencias se mantiene la climatización”. Denunció que tampoco cuentan con ambulancias para el traslado de pacientes a otros centros de salud.
Postura gremial. Fernando Guevara, secretario general del Colegio de Médicos en la zona sur de Anzoátegui, expresó que “en el hospital no hay personal, ni insumos, no hay como atender a las personas y lo más grave es que no hay respuesta del Gobierno Nacional”. Explicó que debido a la diáspora de personal médico, tanto galenos como enfermeros, si reunieran los trabajadores de los hospitales de Barcelona, Cantaura, El Tigre, Anaco y Pariaguán, no pudieran prestarle atención ni siquiera a uno de estos centros de salud. Afirmó Guevara que el Estado no garantiza el derecho a la salud, por lo que abogó por la salida a la crisis política del país, para lograr una solución a los problemas de atención médica en los centros asistenciales públicos.