El Gobierno brasileño expresó este domingo su “condena más vehemente” contra los “actos de violencia” perpetrados en las fronteras de Venezuela con Brasil y Colombia.
“El uso de la fuerza contra el pueblo venezolano, que ansía poder recibir la ayuda humanitaria internacional, caracteriza de forma definitiva el carácter criminal del régimen Maduro”, señaló la Cancillería de Brasil en un comunicado.
Se trata de la primera reacción oficial del Gobierno de Jair Bolsonaro a los graves incidentes que ocurrieron el sábado en las fronteras de Venezuela con Brasil y Colombia, en el marco de la operación coordinada por varios países para introducir alimentos y medicinas en la nación caribeña.
Para Brasil, esos incidentes violentos son un “brutal atentado a los Derechos Humanos”, que “ningún principio de derecho internacional justifica remotamente” y ante los cuales “ninguna nación puede callarse”.
Nicolás Maduro, impidió en la víspera la entrada en el país de la ayuda humanitaria solicitada por Juan Guaidó, quien es reconocido por unas 50 naciones, entre ellas Brasil y Estados Unidos.
En las líneas divisorias con Brasil y Colombia la fuerza pública de Venezuela hizo ayer uso de la fuerza para impedir que grupos de venezolanos realizaran un cordón humanitaria con objeto de facilitar la entrada de la ayuda cargada por camiones.
En la frontera con Colombia se calcula que hubo al menos 285 heridos, mientras la oposición venezolana habla de 14 muertos y más de 20 heridos de bala en la localidad de Santa Elena de Uairén, en el estado Bolívar, limítrofe con Brasil.
La Cancillería brasileña hizo un llamado a la comunidad internacional, “sobre todo a los países que aún no reconocieron” a Guaidó, “a sumarse al esfuerzo de liberación de Venezuela”, reconociendo el “Gobierno legítimo” de éste y “exigiendo que cese la violencia de las fuerzas del régimen contra su propia población”.