Hace tan solo algunos meses, científicos estadounidenses crearon el primer riñón biónico para evitar la hemodiálisis.
Se trata de una creación a base de silicio y células vivas, la cual funciona a partir de los impulsos cardíacos del paciente. Este nuevo invento, llena de esperanzas a todos aquellos pacientes que padecen de graves problemas renales.
El nuevo artefacto está aún en fase de prueba en humanos, pero sus resultados hasta hoy han sido cien por ciento exitosos.
Este gran avance de la medicina, asegurará la mejoría en la calidad de vida de todas aquellas personas que se ven sometidas a tratamientos constantes de hemodiálisis para purificar su sangre, pues trabaja de forma continua desde dentro del cuerpo, ya que se implantará en el paciente eliminando los desechos dañinos, minerales y líquidos innecesarios ayudando a controlar la presión arterial y a mantener el equilibrio adecuado de sustancias químicas, como el potasio y el sodio.
Uso permanente
Lo mejor aún, este artefacto ha sido creado para tratar de manera eficiente al paciente hasta en su etapa final de la enfermedad. Sin duda alguna, es una enorme esperanza para todos aquellos pacientes que hoy en día esperan la pronta donación de un riñón humano.
Este dispositivo no es más grande que una lata de refrescos, tamaño perfecto para ser instalado en el cuerpo humano sin mayores inconvenientes.
