Después que la alcaldesa del municipio Sotillo, Herminia García Ron anunciara la reubicación de solo 380 de los 1.958 buhoneros censados, los informales se alebrestaron este miércoles para tomar la calle Venezuela, una de las cuatro vías que bordea el mercado municipal de Puerto La Cruz de donde fueron desalojados hace 17 días durante el proceso de intervención del espacio comercial.
Para retomar el control de la calle fue necesario la presencia de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariano (GNB), toda vez que los oficiales de la policía municipal fueron desbordados por los comerciantes que persistían en su intención de instalarse a trabajar en plena vía.
Cerca de 100 personas exigían su reubicación inmediata y reclamaban su derecho al trabajo. Carlos Marín pidió que los dejaran trabajar, porque no son 380 los que necesitan llevar comida a sus casas.
Durante el nuevo desalojo, los rumores de saqueos provocaron que los locales del mercado cerraran sus puertas. Algunos aseguraron que los funcionarios hicieron uso de perdigones para asustar a los manifestantes.
García Ron se presentó al lugar para anunciar que en las próximas horas otro grupo de trabajadores podrán trabajar en el estacionamiento que tiene salida a la calle Junín, espacio de donde están retirando estructuras que impiden el libre tránsito. Aseguró que otros informales podrán instalarse en el mercado de Chuparín, que será abordado por las autoridades.