Un nuevo capítulo por el caso de las supuestas irregularidades en el Registro Civil de Guanipa, se escribió este fin de semana cuando el actual director de la oficina, Rubén Pinto, mostró libros que carecen de sellos y firmas del entonces registrador, Rómulo Castro.
Desde que el pasado 25 de junio salió a la luz pública la solicitud de una auditoría a la gestión 2005 – 2009, ante la oficina regional del Consejo Nacional Electoral (CNE), se han derivado réplicas, nuevas acusaciones y contradicciones.
Pinto declaró el viernes 29 «sí, solicite ante mis superiores jerárquicos una auditoría que es lo que me corresponde solicitar (…) Y desde allí empieza a monitorearse o ejercerse un acto administrativo que debe dar algún resultado».
Afirmó en esa rueda de prensa que Castro y su familia son sus amigos. «El doctor Castro debió investigar con tranquilidad y no irse de manera inmediata a hacer una réplica en la que empieza a mal poner mi gestión y poner la de él como una intocable gestión, haciéndole ver a la sociedad en general que he sido un incompetente. Yo le contesto al doctor Castro, amigo, usted está equivocado (…) no hice una solicitud mal sana, hice una solicitud legal».
En un documento al cual tuvo acceso El Vistazo, Pinto argumenta a Dichely Guevara, directora del CNE en Anzoátegui, que desde enero, fecha en la que está delante del Registro Civil ha identificado “algunos vicios en el registro histórico de los ciudadanos guanipenses en los libros de las diferentes áreas especialmente (nacimientos, matrimonios, defunciones), es decir, adolecen parcial y completamente algunos de ellos de firmas de las autoridades competentes”.
Delante de los medios mostró el libro principal de nacimiento número 11 año 2009. “Debió aperturarse en la gestión de Castro y al abrirlo no tiene firma ni sello. Yo pregunto, es una buena diligencia eso?». El actual registrador continuó hojeando. “Acta número 1 de nacimiento, dónde vemos la firma y el sello del señor Castro? …Acta número 2 y cualquiera que voy a abrir, tampoco la tiene”, afirmó Pinto.
El funcionario afirmó que para darle respuesta al usuario que al fin y al cabo no tiene culpa de lo que pasó, su deber es convalidar. “Esto molesta a las personas porque significa esperar al menos 3 días. Cuando no les doy el acta salen diciendo que yo soy malo y que Rómulo se las entregaba, salen diciendo recojan firmas para sacar al registrador”.
Pinto revisó un libro de matrimonio del año 2009 y tampoco estaba firmado. “El acta número 1 está firmada pero sin sello”. “Podemos presumir que hay una razón infundada (…) Allí hay falta de profesionalismo, negligencia e impericia en la gestión. No es corrupción sino una razón infundada por la cual no se firmaban los libros”, ratificó. Con esas pruebas se preguntó si Rómulo Castro iba o no a trabajar al registro.
A pesar del esfuerzo por eliminar la palabra corrupción en su declaración a la prensa y asegurar que lo publicado por este medio de comunicación el 25 de junio no se corresponde con su solicitud ante el Poder Electoral, el último párrafo de la carta presentada ante Dichely Guevara, señala:
“Ciudadana directora muy respetuosamente le solicito a usted como mi superior jerárquico inmediato, se aperture una investigación administrativa sin perjuicio de la responsabilidad civil y penal que hubiere lugar, al ciudadano Rómulo Castro Rondón, ex registrador civil, que a mi modo de ver fue una negligencia y falta de profesionalismo, aunado a una dudosa forma dolosa de corrupción”.
Esta situación que ya está en manos del CNE y de Contraloría Interna, debe ser llevada ante el Ministerio Público, previa ejecución de la auditoria correspondiente, según opinión del alcalde Francisco Belisario Landis.
Otro elemento reciente en este episodio, tiene que ver con la versión que ofrecen fuentes calificadas del Partido Socialista Unido de Venezuela. Afirman que Wilmer Rodríguez, director de organización del Psuv en Guanipa, desmintió que las UBCH en pleno hayan solicitado la destitución del actual registrador, Rubén Pinto.