Luego de rechazar categóricamente el nuevo ensayo nuclear hecho por Piongyang, China activó este domingo un plan de emergencia para controlar el nivel de radiación a lo largo de su frontera con Corea del Norte.
Las autoridades chinas pusieron en marcha a las 03H46 GMT -poco después del ensayo nuclear- un «plan de emergencia» para efectuar «mediciones de control de emergencia de la radiación», dice un breve comunicado del ministerio de Ambiente chino.
Corea del Norte ha probado este domingo una bomba de hidrógeno. Pionyang asegura que su sexta prueba nuclear ha sido «un éxito total». Como resultado de la prueba, el centro sismológico chino registró dos temblores de magnitud 6,3 y 4,6.
Por su parte, el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, ha llamado a aplicar «un castigo más fuerte» de Corea del Norte. Afirmó que Seúl ejercerá presión para que el Consejo de Seguridad de la ONU adopte nuevas sanciones con el fin de aislar «completamente» a Corea del Norte. Consideran la posibilidad de desplegar las armas tácticas estadounidenses más potentes tras el exitoso ensayo de Pionyang.
El jefe del Comité de Defensa surcoreano, Kim Young-woo, considera que «la prueba será un punto de inflexión política y estratégica muy crucial».
«Amenaza para la comunidad internacional»
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, a su vez señaló que la prueba nuclear de Pionyang representa una amenaza para toda la comunidad internacional y es completamente inaceptable.
«La prueba nuclear de Corea del Norte es una violación franca y brutal de las resoluciones existentes del Consejo de Seguridad de la ONU y una grave amenaza para la seguridad de la región y de toda la comunidad internacional», dijo Abe.
Donald Trump, también se pronunció. El presidente de Estados Unidos considera que la actitud hostil de Corea del Norte es una fuerte amenaza para la nación que dirige.