Con la excusa de realizar un operativo de limpieza, la alcaldía oficialista de El Tigre ordenó lanzar agua desde un camión cisterna al nutrido grupo de manifestantes que atendió comprometido el llamado y se congregó en la Plaza Bolívar para participar en la Toma de Venezuela.
Grupos oficialistas trataron de acorralar a los que rechazan la suspensión del revocatorio contra Nicolás Maduro y aproximadamente a las 9:45 am, algunos asistentes se fueron a los puños mientras que otras personas fueron asaltadas por delincuentes en medio de la escaramuza. Pero eso no terminó allí. Algunos arriesgados lograron desarmar la manguera del cisterna.
Piedras y cohetes lanzaron desde la alcaldía
Esta situación movilizó a los manifestantes hasta la sede de la alcaldía, ubicada a escasas dos cuadras, y allí los chavistas activaron cohetes y tumba ranchos. El diputado Héctor Cordero se quedó de pie en la isla de la avenida Francisco de Miranda y logró fotografiar a los sujetos que, amparados por la Policía Municipal, le lanzaban piedras desde el interior del recinto. Mientras esquivaba los objetos contundentes escuchó que uno de ellos decía «A Héctor no, a Héctor no». Acto seguido se inició una batalla de piedras entre manifestantes de lado y lado.
Posteriormente los contrarios al gobierno se movilizaron hasta la esquina del sector El Luchador. Allí fue quemado un afiche del alcalde Jesús Figuera y posteriormente se trasladaron hasta el distribuidor Acosta Millán, frente al Petrucci, punto recurrente de los actos de oposición.
Un grupo de jóvenes permaneció trancando la vía a esta altura. Desplegaron una gran bandera de Venezuela y esperaron pacientes hasta que terminaran los anuncios que se hacían en la ciudad de Caracas.