Yulimar Rojas, de apenas 20 años se erigió este sábado como campeona mundial de triple salto, dando a Venezuela la primera medalla de la historia. En lograr tal hazaña.
Un solo salto válido, el segundo, de 14,41 metros le dio su primer gran éxito en esta competencia que se celebra en Portland, Estados Unidos. Adiestrada por el multicampeón mundial cubano Iván Pedroso desde el otoño pasado en Madrid, llegó a Portland como favorita pese a su juventud.
Pedroso conoció a la atleta caraqueña por medio de las redes sociales y la invitó a trabajar en España.
Después de probarse en salto de altura y en longitud, Rojas apenas lleva dos años entrenando el triple y su técnica lo acusa, pese a los esfuerzos del cubano -cinco veces campeón mundial de longitud bajo techo- por pulir sus defectos en la carrera de aproximación a la tabla y en el talonamiento.
La alemana Kristin Gierisch, segunda en el ránking mundial del año con 14,29, mejoró aquí un centímetro y se alzó con la medalla de plata. Tras despedirse con un nulo, se abrazó llorando a su entrenador. La griega Paraskevi Papahristou completó el podio con 14,15.
En ausencia de la colombiana Caterine Ibargüen, campeona mundial al aire libre e invicta desde la final olímpica de Londres 2012, el atletismo latinoamericano ha encontrado en Yulimar una nueva joya, un diamante todavía sin pulir que en un futuro próximo aspira a disputar la hegemonía mundial a la colombiana.
Con información de EFE