CAF, Banco de Desarrollo de América Latina, reunió a todos sus funcionarios por primera vez después de la pandemia en su sede principal ubicada en Caracas, para alinear la estrategia que busca impulsar la acción integral de financiamiento, asistencia técnica y generación de conocimiento en beneficio de la región.
El Teatro Teresa Carreño fue el escenario seleccionado para el encuentro realizado el martes 25 de octubre. Estuvo presente el presidente ejecutivo de CAF, el colombiano Sergio Díaz-Granados.
La meta de CAF es ser el banco de reactivación económica y el banco verde de América Latina y el Caribe. Para alcanzarlo, sus 21 países accionistas aprobaron en marzo de este año una histórica capitalización por USD 7.000 millones, que le permitirá duplicar la cartera de financiamiento con hasta USD 60.000 millones a 2030. Con el norte definido y la hoja de ruta trazada, el siguiente paso es la consolidación del equipo para hacerlo realidad, señala una nota de prensa de CAF.
«Los vientos no son favorables para una región que ya viene azotada por el golpe de la pandemia y la inflación, por lo que tenemos que prepararnos para un 2023 retador sin perder el norte en el largo plazo para sacar a más latinoamericanos y caribeños de la pobreza, y brindarles mejores oportunidades que a su vez impulsen la sostenibilidad y el cuidado del ambiente. Todos los funcionarios de CAF estamos comprometidos con este objetivo a través de dos rutas que ya definimos y empezamos a transitar: ser el banco de la reactivación y el banco verde”, expresó el presidente de la institución en el evento.
CAF se propone dar una mejor respuesta a los desafíos que enfrenta la región ante los vientos de desaceleración económica, incluso de recesión en 2023, sin perder de vista las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) a 2030.
