Este miércoles un grupo de líderes juveniles de oposición y miembros de la sociedad civil de El Tigre, tenían prevista una vigilia acompañada de un ayuno de 24 horas, a las puertas de la Iglesia San Antonio. La actividad fue cancelada con la llegada de casi 300 personas identificadas con el oficialismo que en principio, dijeron que llegaban al sitio para hacer una fumigación y posteriormente, ya con los ánimos caldeados, develaron que de allí no se retiraban hasta sacar a los opositores del recinto eclesiástico // Artículo relacionado: (Testimonios) Miedo al Papa y su Imperio Romano: Oficialistas de El Tigre impiden vigilia
Vale destacar que la actividad opositora pretendía ser un gesto de solidaridad con las más de 100 personas en huelga de hambre, con los presos políticos y también exigiendo que el CNE fije la fecha de las elecciones parlamentarias.
Alberto Acosta, uno de los jóvenes que participaría en el ayuno, responsabilizó al alcalde Jesús Figuera, de dirigir el amedrentamiento.
«Cuando entramos a la iglesia con nuestras sillas y los equipos que traíamos para la actividad, un grupo de personas encabezadas por el alcalde Jesús Figuera, dijeron que iban a realizar una fumigación y que nosotros no podíamos estar dentro de las instalaciones, que no iban a permitir que estuviésemos aquí y así fuese a punta de golpes, palos y piedras, nos iban a sacar de acá», describió Acosta, quien informó que días atrás habían tramitado el permiso con las autoridades eclesiásticas, mientras que de la fumigación no tenían información ninguno de los encargados de la iglesia.
«A pesar de la intervención del padre Andrés, confirmando que contábamos con el permiso, ellos insistían en decir que esto era un plan orquestado por el imperio, orquestado desde Caracas, que era una actividad de desestabilización, y nosotros no éramos más que unos guarimberos y huelguistas de hambre». Acosta relató que hicieron caso omiso a las ofensas de quienes según él, «fueron enviados por el alcalde Jesús Figuera para encender un problema».